Con esta frase nuestro querido Gerardo
Manuel Rojas Rodó, conocido por todos nosotros simplemente
como Gerardo Manuel, en su mítico
programa de televisión “Disco
Club”, solía presentar
a la consideración de su público el trabajo de bandas o cantantes peruanos quienes gracias a ello lograron hacerse de un espacio en el gusto de la gente.
Ayer como hoy, al artista peruano le fue difícil obtener difusión en los
medios del mismo modo que estos se la brindaban a los artistas extranjeros.
Ayer como hoy, el rock nacional fue marginado y ello originó que se recurra a soluciones planteadas con
buenas intenciones aunque equívocas. Gerardo Manuel, un veterano proveniente de las pioneras bandas de los años 60’s,
consideró como un imperativo que su programa diera un espacio a la producción
nacional sin necesidad que se lo exigiera alguna ley o disposición de los
directivos del canal.
“Disco Club” si bien no fue el primer programa de televisión peruano en propalar clip’s de los éxitos musicales de moda,
sí fue el primero (vía canal 7) especializado en la materia, y cuya existencia -al igual que otros en
el resto del mundo- preparó la llegada del fenómeno de la “MTV” en los años 80’s, con la consecuente “muerte de la estrella de radio”.
Con trucos rudimentarios que a mediados de la década de los 70’s
permitía una incipiente tecnología televisiva, Gerardo Manuel se las ingeniaba para robarse -él mismo- la atención del programa, y
más allá de los vídeos que propalaba, era el verdadero motivo por el cual,
nosotros, sus incondicionales, evitábamos perdérnoslo cada tarde. Fui uno de
aquellos adolescentes fanáticos de Gerardo que prefería retrasar la hora de visita a su chica para después del
programa.
A él, en homenaje a sus 50 años de trayectoria artística, va este post en el que damos cuenta de una
pequeña antología del rock nacional, con temas que, en su mayoría, fueron dados a conocer en “Disco Club” a lo largo de sus más de 20 años de existencia.
El grupo de canciones que aquí presentamos puede
servir para tener una idea de cómo evolucionó el rock en el Perú en el período
comprendido entre las décadas de los 60’s y 90’s, esto es, a lo largo de 30
años.
Jorge Botteri, una de las primeras figuras juveniles que apareciera a inicios de los 60's con la onda del Twist, antesala de la Nueva Ola peruana |
En este blog (El rock'n'roll en la Lima de "Día Domingo") hemos dado cuenta cómo en los años aurorales de esta música una generación de artistas locales, en su mayoría
personas de edad madura habituados musicalmente a ritmos caribeños, con afán
oportunista se subieron “al coche” de
la novedad y trataron de imitar hasta el sonido de las estrellas
estadounidenses que la radio y las películas de cine iban dando a conocer en
nuestro medio. Estos “pioneros” fueron reemplazados por una pléyade de bisoños
artistas adolescentes que, al igual que en otras partes del mundo, reclamaron
para ellos, con carácter exclusivo, la difusión de aquel sonido revolucionario.
A partir de ese momento, con marchas y contramarchas,
se comenzó a desarrollar en los países de Latinoamérica un rock de carácter local. Para ello resultó trascendental superar el
prejuicio según el cual el rock’n’roll
solo podía ser cantado en inglés.
En los 60’s, en el Perú como en Argentina y Chile, comenzaron
a surgir “grupos” orientados a la música beat
merced a la gran influencia que en dicha década causó en todo el mundo la Invasión Musical Británica, grupos que si
bien grababan temas con letras en español, su temática era demasiado simple y
trivial orientada sobre todo a recurrentes historias chico-chica o, en algunos
casos, con letras sin sentido que solo pretendían dar rienda suelta a la
algarabía y que para nadie podían tener un significado especial, salvo que -gracias
a la mojigatería de aquel entonces- se le encontrara alguno.
Los Saicos |
La consigna con la que se formó Los Saicos (palabra
que resulta de la eliminación de la letra “d”, Sádicos)*, fue “meter
escándalo” gritando sus canciones antes que cantándolas para alborotar a la
sociedad limeña. “Demolición” fue influenciada por el tema surf de los Trashmen
(USA): “Surfin’ Bird” (1962), que
tampoco dice nada pero cuyo sonido y vocalización la hace agresiva. En la
introducción de “Demolición”
podemos escuchar
el trémolo característico de las canciones surf
al estilo de Dick Dale & His Delton’s.
“Demolición” apareció pocos años antes del golpe militar de
Velazco y en una época muy distante a los años en que nuestra sociedad se vio agredida
por la violencia. De haber aparecido justo en aquellos tiempos, no hubieran
faltado voces denunciando que su letra era una apología contrarrevolucionaria o
terrorista.
Unos años más tarde, entrados ya en los 70’s, algunos
músicos todavía se debatían entre el dilema de escribir y cantar en inglés o
hacerlo en español. En todo caso, ese dilema se planteaba teniendo a la vista
el deseo de abrirse paso en el negocio de la música y bien sabemos que por
aquel entonces tanto los Estados Unidos como Europa acaparaban el mercado
discográfico. En esos días el rock sólo se escuchaba en inglés;
mientras que el idioma español se identificaba con la denominada “música romántica” y la “afro latina caribeño americana” (Salsa).
Todavía no despegaba a nivel internacional el rock argentino (aunque a nivel
interno ya existía una verdadera movida) y la existencia del rock mexicano solo
era evidente para los nativos de ese país.
We All Together |
Saúl y Manuel
para el año 1972 eran consumados músicos cuya trayectoria pasaba por haber formado la
New Juggler Sound y Laghonía, bandas
que pueden ser consideradas fundamentales en la evolución del rock en el Perú
por el hecho que asumieron la música con un criterio más profesional y desarrollaron un trabajo más elaborado.
Luego de haber tomado parte en la grabación de algunas
canciones del álbum “Etcétera”,
último trabajo producido por Laghonía, Carlos
Guerrero les propuso hacer versiones de temas de Paul McCartney y la banda
que éste apadrinara a finales de los 60’s con el nombre de Badfinger, y en ese año 1972 lanzaron al mercado discográfico peruano un cover de
Carry On Till Tomorrow uno
de los temas aparecidos en el álbum “Magic
Christian Music” de Badfinger (año
1970, banda sonora de la película “Un
Cristiano Mágico” con la actuación de Peter Sellers y Ringo Starr). Este
tema, versionado por We All Together gustó
tanto que hasta el día de hoy se recuerda más en la versión nacional que en la
de los Bad.
Carry On Till Tomorrow por
We All Together puede
ser considerada un hito en el rock nacional ya que con ella quedó demostrada la
capacidad y calidad de los músicos peruanos. Era cuestión de agudizar la
creatividad y originalidad, como dar el salto decidido al idioma español.
Álbum We All Together (1972) |
Al momento de lanzar el álbum del mismo nombre, We All Together estuvo conformado por Saúl Cornejo (guitarra), Manuel
Cornejo (batería), Carlos Guerrero (voz),
Carlos Solom (teclados), Ernesto Samamé (bajo).
Cabe anotar que en el mini play con canciones en español (año 1973), Saúl y Manuel Cornejo
junto con Carlos Guerrero, bajo el
mismo nombre de We All Together, grabaron la canción “Lo más grande que existe es el amor” que
se constituiría en uno de los primeros temas de rock peruano más exitosos.
We All Together se
disolvió en 1974, para luego ser retomado por Carlos Guerrero a lo largo
de 30 años.
Para comienzos de 1980, la movida rockera peruana se
encontraba totalmente activa con bandas nativas presentándose en diversos
escenarios de la capital y del interior del país. A comparación de las primeras
bandas de la década de los 60’, sus integrantes en su mayoría habían recibido
formación musical y habían sido influenciados por las grandes bandas
estadounidenses o inglesas.
Frágil |
Frágil alcanzaría
notoriedad y fama -más allá de sus seguidores incondicionales- con el tema “Av. Larco” que
trataba sobre las noches de juerga en uno de los distritos más cosmopolita de
nuestra ciudad capital: Miraflores. Las letras de las canciones comienzan a
tratar temas más serios y reflexivos sobre hechos que resultaban evidentes para
el público limeño y peruano en general. El adolescente nativo, gracias a que se
cantaba en su idioma, comienza a gustar no tan solo de la buena música sino
también de las letras de las canciones.
En la época en la que apareció “Av. Larco”, aún no se hacía patente la violencia subversiva de
grupos terroristas como “sendero
luminoso”; la crisis económica con una inflación galopante aún no se desataba,
por tanto, las preocupaciones del ciudadano capitalino eran otras.
Álbum Avenida Larco (1980) |
A mediados de los 80’s se vivía ya en una realidad
distinta. En pocos años nuestra sociedad quedó hecha trizas; en las principales
ciudades de la república la violencia terrorista nos azotaba día y noche. Para
rematar la situación, en la capital también comenzaron a tomar notoriedad
bandas criminales como la de los retacos,
los pitufos, los destructores y los injertos. Como preludio a esta pesadilla, en los primeros 80’s, la
ciudad de Lima fue testigo de fugas y tomas espectaculares de establecimientos
penales. La incipiente democracia, tras un largo período de dictadura militar,
no se mostraba ante los ojos del ciudadano como apta para enrumbar a este país
hacia el desarrollo social y económico. El resultado de todo esto provocó una
fuerte sensación de desánimo y desesperanza en la población. Comenzó la ola
migratoria hacia el extranjero, pues nadie creía que el Perú fuera un país viable.
Nuestros ojos y oídos estaban ya acostumbrados a ver y
escuchar de todo. Los medios de comunicación se esmeraron en mostrarnos escenas de
violencia y muerte. Desayunábamos, almorzábamos y cenábamos violencia
televisada. Ante el mundo Perú era sinónimo de violencia y descomposición. Para
aquellos aciagos días, el peruano se reconocía como integrante de una sociedad
violenta.
Desde los años 70’s la música folklórica y la música
latinoamericana había ganado muchos adeptos y el rock peruano experimentaba con
la fusión de sonidos. Instrumentos eléctricos que caracterizaban la naturaleza
global del rock se mezclaban con instrumentos acústicos característicos de los
países andinos. El sonido de zampoñas, quenas y charangos se hacían cada vez
más familiares. El rock por su parte hacía tiempo dejó de identificarse con
cierto sector o “clase” social. En
los denominados barrios populosos de la capital existía una movida rockera muy
activa, sobre todo en la corriente subterránea
(punk, hard rock y otras hierbas).
Es en este panorama que aparece una banda que
practicaba la música folklórica y el rock
fusión cuyo nombre emparentaba socialmente con nuestra realidad y se
alejaba de referencias abstractas: Del Pueblo... Del Barrio, hijos
ilustres del distrito de La Victoria, liderados por el músico Piero Bustos.
Del Pueblo... Del Barrio lanza en 1983 el tema “Escalera
al infierno” título que en
oposición hace referencia al clásico de la banda británica Led Zeppelin, “Escalera
al cielo”.
“Escalera al infierno” se nos antoja como una suerte de “retablo” musical de la situación social existente en el Perú en
los años 80’s, descrita líneas arriba. No es una canción con tinte político,
sino de crítica social, que muestra nuestro infierno lleno de corrupción,
drogas, alcohol, delincuencia y depravación. En comparación con “Av. Larco”,
“Escalera
al infierno” es menos
descriptiva y más introspectiva. Con un sentido rockero resaltan aires andinos
y afroperuanos.
La difusión de “Av. Larco” y
“Escalera
al infierno” se
benefició con la aparición de clip’s
especialmente rodados para dichas canciones, los cuales constituyen los
primeros vídeos comerciales del rock
peruano.
Piero Bustos |
En el campo de la música, en las radios se escuchaba
salsa, rock en español, cumbia tropical andina (mal llamada chicha). En los 90’s, la música
romántica comenzó un paulatino declive, como también la música anglosajona. El
rock se escuchaba mayoritariamente en
español y en la meca del show bussines,
Estados Unidos, comenzaron a aparecer artistas latinos, lo que provocó una
mayor actividad de artistas en los
países de Sur América.
Las letras de las canciones de rock peruano hacía
tiempo que volvieron su atención a lo que somos y a nuestra realidad. Con
fusión o sin ella, su sonido mostraba cierto tinte característico, nunca más
evidente que en “Triciclo
Perú” uno de los temas emblemáticos de una de las bandas más
importantes de la historia rockera del Perú, Los Mojarras.
La aparición en escena de Los Mojarras coincidió con la producción de telenovelas o sit-com locales que trataban la realidad
cotidiana de nuestra sociedad y que en varias ocasiones se musicalizó (y
benefició) con sus canciones. Así, “Triciclo
Perú” fue la canción característica de la teleserie “Los de Arriba y los de Abajo” (de
Michael Gómez, año 1994) que además satirizaba a la clase política de aquellos
años y que tuvo un gran éxito e
impacto. “Triciclo Perú”
formó parte del álbum “Ruidos de la Ciudad” y el tema
fue considerado el mejor de aquel año.
Tal vez la voz poco trabajada pero sentida y sincera
de Hernán Condori, conocido
artísticamente como “Kachuka” (“eso no se le hace a un poeta”) revistió de más
realismo a “Triciclo Perú” que para mi gusto es la canción de rock más
auténticamente peruana.
La formación histórica de Los Mojarras puede ser la conformada por Hernán “Kachuka” Condori (voz), Ricardo Centeno (guitarra), Felipe
Ascárate (bajo), Ismael Carhuanina
(batería), Jorge Bravo (timbales).
Kachuka |
Un comunicado difundido en la últimas semanas del mes
de julio del presente año, da cuenta que el rock no goza de la aceptación o
interés de los consumidores y que está muy por debajo de la cumbia. Aunque no lo señala el
comunicado, da a entender que esto viene sucediendo debido a su falta de
“calidad”.
No creemos, en lo absoluto, que la cumbia sí tenga “calidad”, pero sí creemos que la forma cómo se gana los espacios y
la atención del público consumidor no es a punta de leyes sino de creatividad,
originalidad, buen gusto y mucho arte.
Si hay algo que caracteriza al rock como medio de expresión, es su carácter marginal, nunca
sometido ni asociado al sistema. Desde la época de los pioneros como Elvis, pasando por los Beatles, Stones, Zeppelin, AC-DC y demás, fue el propio peso de su
material quien les garantizó un espacio en el gusto de la gente, sea focalizado
o generalizado, no una ley. La calidad no se obtiene a través de normas
jurídicas.
Estoy seguro que el músico nacional no necesitará de una ley que le garantice la
difusión de su trabajo sino su propio esfuerzo por mejorar, y ello le abrirá
las puertas de los medios.
Debemos recordar también que el rock ya dejó hace mucho tiempo de copar el interés de la gente en
todo el mundo, hoy son los gadgets,
las redes sociales y otras cosas las que atraen el interés del adolescente. La
vida cambia, todo cambia, pero sin duda fue la baja calidad de la música que hoy se hace, en general, lo que ayudó a que se de esta realidad.
Por último quiero mencionar que las bandas y temas compilados son producto de una selección arbitraria. Las omisiones aquí no
son un olvido. Somos conscientes de la trascendencia que han tenido en el
desarrollo del rock peruano bandas
como Traffic
Sound, Pax, la infinidad de bandas subte,
artistas como Daniel F, Micky Gonzales, Pedro Suarez Vertiz y su banda Arena Hash en otras orientaciones musicales que forman
parte de ese árbol frondoso en que se convirtió el rock. Lo que hemos
querido es solo resaltar ciertas características y las canciones escogidas se
prestan (creo yo) a ello.
Referencias:
(*) También se dice que el nombre de Saicos proviene de una deformación de la palabra Seiko, nombre de una conocida marca de reloj pulsera.
¡VIVA EL PERÚ CARAJO!
Referencias:
(*) También se dice que el nombre de Saicos proviene de una deformación de la palabra Seiko, nombre de una conocida marca de reloj pulsera.
¡VIVA EL PERÚ CARAJO!
"Escalera al Infierno"
Del Pueblo... Del Barrio
Soundtrack:
Demolición
Los Saicos
1965
Carry On Till Tomorrow
We All Together
1972
Av. Larco
Frágil
1980
Escalera
al infierno
Del Pueblo, Del Barrio
1983
Triciclo
Perú
Los Mojarras
1994
Fuente consultada, Libro Días felices - Sótano Beat. Rock and Roll, Twist, surf, a-gogó,
enfermedad, cumbia beat, psicodelia y otros sonidos juveniles entre 1957 y 1983:
Diego García H., Hugo Lévano, Luis Berrocal y otros. Ediciones Contracultura. Lima
- Perú. 2012. De venta en CONTRACULTURA LIBRERÍA Y SALÓN DEL COMIC. Av. Larco 986,
Miraflores, Lima, Perú.
Post reeditado en 10 - 07 - 2014
Post reeditado en 10 - 07 - 2014
Texto, compilación y mezcla musical por: